De hecho, en el año 2018 los agricultores de Villapalacios, un pequeño pueblo de la Sierra de Alcaraz, denunciaron que murieron entre 2.000 y 3.000 gallinas ese año por culpa de los aviones que sobrevuelan la explotación procedentes de la base aérea de Los Llanos, en la ciudad de Albacete. El estruendo que provocan los aeroplanos no sólo mataba a las aves por estrés sino que también rompía sus huevos.
Otros estudios hallaron niveles por encima de los 85 decibelios (dB) que conducían a una disminución de la ingesta de alimento de entre un 15 y un 25 %. Por supuesto, una menor ingesta de alimento obstaculiza el crecimiento de las aves.
En conclusión, todas las aves y especialmente las gallinas necesitan tranquilidad para tener una vida sana y saludable, así que si detectas contaminación acústica cerca de ellas actúa rápido para evitarlo, te lo agradecerán.